¿Qué es una política pública para y desde las infancias? ¿Cómo pensarlas y construirlas en el marco de un proyecto de país frente a sus paradojas? Estos interrogantes abrieron el encuentro, en el que la especialista se propuso pensar las infancias a partir de ciertas concepciones en torno a ellas. “Es importante tener una idea distinta de la infancia y darse cuenta de que es el origen mismo de la ciudadanía y, por lo tanto, tiene todas las cosas positivas que va a tener durante la vida dicha ciudadanía. El niño vive, piensa en imágenes. Por lo tanto, el abordaje de las infancias sería a partir de un sistema no adultocéntrico, donde el niño sea, no la medida de todas las cosas ni el rey de la escuela; sino que el niño sea parte de la naturaleza, sea parte de la cultura. Parte de su propia infancia, que no sea solo un paso para ser adulto”, destacó González. Luego continuó: “Las políticas públicas para el abordaje de la infancia tienen carácter estratégico. Hay que poner en juego una ciudadanía plena con ampliación de derechos que sean respetados y que tengan consecuencias en quienes no lo respetan, ya sea en la justicia así como en todos los ámbitos de la vida pública”. Agregó, además, que «las políticas públicas deben ser integrales, intergeneracionales y transversales». «Hay que poner en debate qué es la infancia», a la vez que consideró que «una política de infancia es un entramado de planes, programas, acciones territoriales situadas; con un tiempo de estimación, con una continuidad, con una cantidad de vínculos, de presupuestos en dinero y de presupuestos conceptuales para abordar la infancia». En esta línea planteó que los gestores culturales se enfrentan a grandes desafíos a la hora de pensar y de trabajar para las infancias: «El gestor se encuentra con que con su acción está solo en el territorio. Otro desafío que tiene es crear un clima de consensos necesarios para que los niños tengan muchos espacios de acción, de juego seguro, espacios de aprendizaje situado. Que eso no sea el monopolio de la escuela». En esa línea subrayó que «un gestor cultural que trabaje con las infancias debe poder manejarse horizontalmente, saber escuchar, dialogar con las autoridades superiores para tener presupuesto y para que los materiales con los que trabaja con los niños sean de óptima calidad; salir con los niños a distintas localidades para conocer el mundo. Es necesario que haya una distribución de la palabra, perspectiva de género y tiene que haber un profundo respeto por las infancias», consideró. Abogada, gestora cultural, directora teatral, docente universitaria y referente en temas vinculados a las infancias, «Chiqui» González encuentra «fundamental que el gestor cultural conozca y defienda los derechos de los niños». FUENTE: mInisterio de Cultura de la Nación.
Abogada, gestora cultural, directora teatral y docente universitaria, «Chiqui» González brindó una charla en Rosario, Santa Fe, sobre políticas públicas para las infancias.
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