Sol tu compañera, tus hijos, tus amigos, el arco iris en el canal y el sol que se negó a estar ausente te acompañaron a tu último lecho. Cuando el amor es tan profundo alguno siempre dice lo que todos queremos decir. Alguien pidió un aplauso, vos sabés quien fue, nosotros también y todos aplaudimos, porque sabemos que no te podés ir así nomás. Alguien dijo ¡Cany presente! Algunos lo repetimos, otros estaban ensimismados mirando el humo del copal, los pétalos de flores, las hojas de coca, las tinturas que te son tan familiares, las especies y condimentos que iban pintando tu última nave que allí, profunda en la tierra, se convirtió en un cuadro pintado por tu esposa, por tus hijos, por tantos compañeros y amigos que fueron hasta allí, al borde del mar contigo. En un momento Danai Núñez se acercó y se arrodilló junto a Sol que estaba ahí dejando a su cuerpo descansar frente a vos, Danai canto “Zamba Para No Morir” pintando el ambiente con su voz:
Mi razón no pide piedad
Se dispone a partir
No me asusta la muerte ritual
Sólo dormir, verme borrar
Una historia me recordará
Vivo
Veo el campo, el fruto, la miel
Y estas ganas de amar
No me puede el olvido vencer
Hoy como ayer, siempre llegar
En el hijo se puede volver
Nuevo
Al quemarse en el cielo la luz del día
Me voy
Con el cuero asombrado me iré
Ronco al gritar que volveré
Repartido en el aire a cantar
Siempre
Todos, tal vez porque no sabíamos la letra, tal vez porque algunas cosas nos dan pudor, todos, seguro, queríamos cantarte, pero el nudo en la garganta sólo nos permitió llorar, tirando por tierra, una vez más en alguno de nosotros, esa mentira que los hombres no lloran.
Hasta la próxima “Fiesta de la Ballena” Cany, allí en esos mares que seguro seguirás navegando, bosquejando, pintando y denunciando.
PRODUCCIÓN: La Mirada.
FOTOGRAFÍA: Gentileza Maca Demattia